Paloma
Bordadora, Oaxaca de Juárez

Paloma (Imelda Tejero) es una mujer bordadora originaria de Salina Cruz, Oaxaca, ciudad ubicada en el Itsmo de Tehuantepec, conocido por su grandes aportaciones al bordado Oaxaqueño. Aunque el bordado es una tradición en su familia, los inicios de Paloma se inclinan más hacia el bordado intuitivo o experimental, siendo su abuela quien la introduce a este saber cuando tenía 9 años al darse cuenta de su gran curiosidad por aprender.
“Mi abuela materna me enseñó a bordar cuando tenía 9 años, la curiosidad de verla bordar me hizo querer hacerlo y ella me compró una funda de almohada y ahí comencé con puntadas básicas (que ahora es llamado bordado intuitivo/artístico); entre la escuela y demás actividades bordaba esporádicamente”
Esa curiosidad se convirtió en pasión y más adelante en una herramienta de vida, que la llevó a escribir su tesis sobre las “Prácticas comunicativas de mujeres en el bordado” en 2014 al terminar su carrera en comunicación. El bordado siempre estuvo presente en su vida para rescatarla de aquellos momentos en los que estaba estresada con el estudio o no tenía una respuesta clara sobre cómo ganarse la vida, hasta que en 2017 por consejo de una amiga inicia su propio emprendimiento “Paloma bordado hecho a mano” haciendo referencia al que es su sobrenombre desde pequeña. En 2019 empieza a dar clases teniendo una respuesta bastante positiva, lo que le lleva a participar con centros culturales y escuelas como maestra, dada su gran habilidad para explicar y la variedad de técnicas que maneja.
“El bordado es un proveedor de hogares, es una fuente de empleo que permite al bordador/ bordadora tener ingresos con el trabajo de sus manos, a mí me gusta decir que es un saber productivo. En Oaxaca es una actividad que no tiene género aunque es realizado en su mayoría por mujeres. Es lo que nos identifica como oaxaqueños y como mexicanos, por eso decidí aprenderlo y enseñarlo, trabajar con niños me permite pasar mis conocimientos a otras generaciones”
Paloma lleva dedicándose al bordado un total de 25 años, y su visión sobre este arte así como la capacidad para entender lo que la marca necesita son los motivos por los cuales forma parte del equipo de NOON.

